El Rey García Sánchez III después de reconquistar a los árabes la ciudad de Calahorra en 1045, mandó edificar un templo romano-mozábare en gratitud a la Virgen cuya imagen encontró en una cueva un día que, según la leyenda, iba persiguiendo a su halcón. En 1052, el monasterio se dedicó a la Virgen Santa Maria. De ese primer monasterio apenas quedan vestigios.

El Claustro de los Caballeros es una obra maestra de la arquitectura y escultura del siglo XVI De estilos gótico florido y plateresco. Llamado de los Caballeros por el deseo de los nobles de ser enterrados en él. A lo largo de su historia el monasterio fue severamente saqueado, expoliado, destrozado, abandonado, utilizado como cárcel, hospital, teatro, escuela, etc.     En 1889 merced a las gestiones y esfuerzos de un ciudadano de Nájera, fue declarado Monumento Nacional. Desde entonces, Autoridades, Asociaciones, Comunidades religiosas y otros estamentos han recuperado este excepcional monasterio que hoy podemos admirar

Cuenta la historia que en Nájera se instalaron los árabes en el año 714, convirtiéndose durante los siglos IX y X en una plaza principal para Al-Andalus. Los reyes de Castilla y Pamplona unidos, reconquistaron la zona en el año 923. Abderraman II como respuesta destruyó Pamplona lo que hizo que la corte pamplonesa se instalara en Nájera, convirtiéndose de ese modo en centro político y cultural. El visitante al Monasterio podrá observar los mausoleos de los reyes e infantes del Reino de Nájera-Pamplona

Encontrarán información más detallada y completa en la web del Monasterio (https://www.santamarialareal.net/es/planifica-tu-visita), en guías como la de Cedosa, Arteguías, Wikipedia, etc. y lo más importante, la visita al Monasterio.

Fotografías: Xoandi