



Los castros celtas son antiguas fortificaciones construidas por la cultura celta en la Edad de Hierro, entre los siglos VIII A.C. y I A.C. Los celtas construian murallas alrededor de sus comunidades para protegerlas. Las casas eran normalmente circulares


El Castro de Santa Maria de Cervantes se encuentra a unos 12 kilómetros de San Román, capital de su municipio, en la provincia de Lugo. Este poblado fue estudiado por los arquéologos durante los años 1995 y 1996, pero todavía queda una gran parte de la superficie sin escavar.

Durante las excavaciones se encontraron 23 construcciones de uso doméstico, además de zonas de paso, escaleras, canales y sistemas de drenaje. La importancia de este asentamiento reside en la información que acerca la cultura castreña hacia la romana en lo que se refiere sobretodo a las explotaciones mineras. Hay indicios de que este asentamiento se fundó para explotar las minas de la zona.


Sobre las ruinas del conjunto castreño se halló una necrópolis de los siglos XIII y XIV formada por 56 sepulturas. En la mayoría de las sepulturas se recuperaron restos óseos.

En la parte más alta del poblado se sitúa el templo de Santa Maria do Castro, una de las iglesias católicas más antiguas de Galicia


Muchos son los castros que se pueden visitar en Galicia pero destaco: el Castro de Santa Tegra en A Guardia (Pontevedra). Castro de Baroña en Porto de Son (A Coruña). Castro de Viladonga en Castro de Rei (Lugo) y el Castro de San Cibrao de Las en San Amaro (Ourense)
Fotografías de: Xoandi
Textos extraidos de la Guía Artística del Monasterio de San Juan de Duero. Soria. Historia y descripción. Elías Terés Navarro
«El monasterio de San Juan de Duero, situado extramuros de la ciudad de Soria, es un monumento religioso emblemático de la Edad Media en Castilla. Ha sido objeto de numerosas investigaciones y estudios, desde amplias perspectivas, considerándose único por su originalidad y su significación dentro de la historia del arte y de la arquitectura, destacando su papel de aglutinador de estilos.

En la actualidad de todo lo que fue un conjunto monasterial que perduródesde su fundación en el siglo XII hasta su abandonen el XVIII, sólo se conservan la iglesia y el claustro, habiéndose declarado Monumento Nacional en 1882.»

Claustro






Iglesia

Río Duero

Puentedey se encuentra en la Merindad de Valdeporres, en la provincia de Burgos. Está emplazada en una hermosa zona, entre valles y praderas. El río Nela, uno de los afluentes del Ebro, atraviesa la población.

El atractivo principal de Puentedey es su situación sobre un espectacular arco o puente natural que el río Nela ha ido horadando en la roca a lo largo de los siglos. La altura del puente alcanza los 15 metros.

Al parecer, el nombre de Puentedey viene dado por los primeros moradores del lugar, que consideraron que el puente natural de la población había sido creado por Dios. De ahí que lo llamaran «Puente Dei».

La iglesia románica de San Pelayo y el Palacio de los Fernández de Brizuela, construido entre los siglos XV y XVI, son edificios interesantes de la localidad.

A menos de dos kilómetros se encuentra la cascada de Mea, una interesante caída de agua que estalla cuando llueve mucho y en tiempos de deshielo. Una sencilla ruta desde el pueblo conduce a un pequeño espacio para dejar el coche y luego un camino de 200 metros para llegar al pie de la cascada.




Puerta de acceso al interior del recinto

Esta calle conduce a la iglesia

Plaza central




Esta calle da la vuelta a la muralla



Horno comunal



Soportales


Y de nuevo en la plaza central

La impresionante muralla en su lado posterior

Campos de labor que en su día eran de cepas, almendros, cereales y hortalizas, pertenecientes a los habitantes de la villa
L’Estany es una pequeña localidad situada en la Comarca del Bages (Barcelona). Su topónimo se debe a la existencia de una laguna (estany en catalán) en las cercanías de la población. Fue desecada durante la mitad del siglo XVI
Los primeros documentos que hablan de la existencia de una iglesia en la zona datan del año 990.
En 1080 el obispo de Vic, Berenguer Sunifred de Lluça decide fundar un priorato de canónigos agustinos bajo la advocación de Santa María. A partir de su consagración por el Arzobispo de Tarragona en 1133, el cenobio no dejaría de crecer en importancia y en extensión de sus heredades. En 1264, coincidiendo con la finalización de las obras del claustro, Santa María de L’Estany fue elevada a la categoría de abadía.
Desde finales del siglo XIV y, sobre todo, durante el siglo XV, el monasterio fue sufriendo una progresiva decadencia que, además, se vio agravada primero por un incendio en 1395 y después por dos terremotos que asolaron la comarca en 1428 y 1448 provocando serios daños en dependencias monacales. A finales del siglo XVI el monasterio fue secularizado y convertido en colegiata, rango que detectaría hasta el año 1775, fecha en la que tras quedar definitivamente extinguida la comunidad, fue destinada a iglesia parroquial de la población de L’Estany.
El claustro románico es una joya del patrimonio catalán. El ala norte, iniciada a mediados del siglo XII, es la más primitiva. En los capiteles se representa escenas de la vida de Cristo, desde el nacimiento hasta el calvario, y otros temas alegóricos a la redención de la humanidad.
Los capiteles de cada una de las otras galerías muestran escenas que van desde figuras de monstruos fantásticos a otras más paganas. El ala sur del claustro es la más moderna, se terminó a finales del siglo XIII, principios del XIV
En el claustro, además de los capiteles, pueden verse los sarcófagos de la familia Peguera (1335) y de los abades Jaume de Rocabruna Desvall y Berenguer de Riudeperes (siglo XIV)
La iglesia de Santa María, de estilo románico de base única y con tres ábsides, fue construida en el siglo XII. Sufrió graves desperfectos durante el terremoto ocurrido en mayo de 1448. La iglesia se reconstruyó mediante arcos góticos que quedaron posteriormente cubiertos durante una nueva reconstrucción llevada a cabo en el siglo XVII. La antigua sala capitular es hoy la Capilla del Santísimo
Esencialmente destacable resulta la escultura gótica de alabastro de la Virgen de L’Estany amamantando al niño. Una talla del siglo XIV
Del conjunto medieval quedan hoy la iglesia, las salas del museo y el magnífico claustro que merece ser visitado con todo detenimiento, observando con atención los detalles de cada capitel
Referencias: Folleto del Monasterio de L’Estany y Webs en Internet
El conjunto de la instalación supera los 4400 metros cuadrados. Destacan valiosos mosaicos que cubren una superficie de más de 1400 metros cuadrados repartidos en varias dependencias, siendo el más espectacular el del gran salón de las recepciones. Este mosaico, de 175 metros cuadrados, está considerado como uno de los más extraordinarios del mundo.