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Todas las entradas para el mes de 27 agosto 2013
Monasterio de San Lorenzo de Carboeiro
(Pontevedra – Galicia)
El monasterio benedictino de San Lorenzo de Carboeiro se encuentra en un hermoso paraje a orillas del río Deza, en la provincia de Pontevedra (Galicia)
El Padre Antonio Yepes que vivió en el monasterio, escribe en 1615 en la Crónica de la Orden Benedictina al historiar el monasterio de Carboeiro:
“Fue San Lorenzo de Carbonario en tiempos abadía, edificada en la era 974 por el conde Don Gonzalo y por la condesa Doña Teresa, como consta por la carta de dotación, fecha la sobredicha era, que viene ser el año de Cristo 936. Está fundado este monasterio en tierra de Deza, ribera del río llamado también Deza, que es en el obispado de Lugo. En aquel lugar hubo antiguamente una ermita que poseyó un hombre llamado Egica, y alrededor tenía algunas granjerías; todas se las compró el conde Don Gonzalo y comenzó a fundar el monasterio de San Lorenzo”
Fue notable este monasterio, por su historia, sus riquezas y sus magníficos edificios. Una obra calificada como una de las más genuinas del románico gallego. Las obras de la iglesia actual comenzaron en el año 1171, durante el mandato del abad Fernando, según reza una inscripción existente en el interior.
Real Abadía de Samos
(Lugo – Galicia)
El Monasterio de San Julián de Samos se halla enclavado en el pueblo de Samos, en la provincia de Lugo, en el tramo de O Cebreiro a Sarria del Camino Francés a Santiago de Compostela.
Hasta la reconquista por el rey Fruela I de Asturias (756-768) estuvo abandonado debido a la invasión musulmana en 714. A la muerte de Fruela I, su viuda y su hijo Alfonso hallaron asilo en el monasterio. En él se crió el futuro rey Alfonso II de Asturias, el Casto.
Guía Breve de la Real Abadía de Samos, Carolina Casal Chico.
El Monacato en Galicia, Hipólito de Sa Bravo.
Gran Enciclopedia Gallega, Silverio Cañada, editor.
Santa María la Real de las Huelgas
(Burgos)
El monasterio de Santa María la Real de las Huelgas se halla situado en la ciudad de Burgos (España)
La fundación del monasterio en 1187 se debe a la disposición del monarca Alfonso VIII de Castilla (1156-1214) y de su esposa Doña Leonor de Inglaterra (1160-1214), ansiosos de convertir este lugar en Panteón de Reyes y digno retiro para mujeres de la realeza y de la alta aristocracia.
Desde el monasterio cisterciense de Santa María de la Caridad de Tulebras (Navarra) llegaron un grupo de monjas que iniciaron la comunidad de las Huelgas. Las dos primeras abadesas fueron la infanta de sangre real Sol y la infanta Constanza, hija de los reyes fundadores.
La abadesa de Las Huelgas llegó a disponer de una autonomía y poder tan elevados que sólo dependía del papa y estaba por encima de la curia episcopal. Ejercía su autoridad sobre un total de sesenta y cuatro villas, aldeas y lugares. El señorío jurídico tenía su propio fuero, cuyas leyes en el tema civil y criminal dirigía y vigilaba la abadesa. Podía nombrar alcaldes, y abadesas en los monasterios de su jurisdicción.
Durante la Edad Media se celebraban aquí ceremonias tan importantes como las de coronar reyes y armar caballeros. Fernando III el Santo, Eduardo I de Inglaterra. Alfonso XI de Castilla y de León, Pedro I de Castilla, Juan II entre otros.
Como es sabido se quería convertir el monasterio en Panteón de Reyes por lo que en toda la iglesia pueden verse muchos sepulcros de gran valor histórico. Destacan los del propio fundador y sus reinas consortes e infantes de sangre real.
Destacan también los sepulcros de don Sancho, hijo de Fernando III el Santo y arzobispo de Toledo; la tumba de Doña Blanca de Portugal y de Doña Berenguela (hija de los fundadores), así como el sepulcro de Don Fernando de la Cerda y de la infanta Leonor.
Estas sepulturas sufrieron un grave expolio en el Siglo XIX durante la ocupación de las tropas francesas de Napoleón. Muchas se han podido recuperar, pero no el ajuar que se conservaba junto al cadáver. Unicamente se salvó el de Don Fernando de la Cerda, cuyos ropajes intactos se guardan en el Museo de Telas Medievales de Burgos.
Claustros
Dos son los claustros que podemos observar, el claustro grande de San Fernando (Siglo XIII) de estilo gótico que se terminó durante el reinado de Fernando III el Santo y el pequeño o de las Claustrillas (Siglo XII) de estilo románico que las monjas utilizaron para su propio recreo y meditación al construirse el grande.
La Sala Capitular es una de las piezas más importantes del monasterio. En ella se puede apreciar como elemento más significativo el llamado Pendón de las Navas de Tolosa que se considera parte de la tienda de campaña del sultán Muhammad An Nasir, conocido por los cristianos como Miramamolin, derrotado por el rey Alfonso VIII en la batalla de las Navas de Tolosa en 1212.
Por su valor histórico, arquitectónico y artístico Santa María la Real de Las Huelgas merece ser visitado en más de una ocasión.
Consultar días y horas de visita en: http://www.patrimonionacional.es/getdoc/3979f998-e17f-40b6-8a6f-5163a6a7b21c/Horario.aspx
Fotografías: Xoandi
Bibliografía: Wikipedia, Monasterios de España de Lunwerg Editores, Monasterios y conventos de la Provincia de Burgos de Ediciones Lancia. Guía de Santa María la Real de las Huelgas de María J. Herrero
Monasterio de Santa María de Carracedo
(Carracedelo – Bierzo – León)
Septiembre 2009
El Monasterio de Carracedo está emplazado en el municipio de Carracedelo, a orillas del río Cúa, en la llanura del Bierzo Bajo entre Ponferrada y Villafranca.
Fue fundado en el año 990 por el rey Bermudo II para auxiliar a los monjes que huían de los ataques de Almanzor, que devastaban lo monasterios de la meseta dejando a sus moradores desamparados y sin cobijo. El rey, de profundas raíces bercianas, les donó su propia finca con todas sus pertenencias en la villa de Carracedo, para que construyeran allí un nuevo monasterio, al que llamaron de San Salvador. El monarca ansiaba reposar algún día entre las paredes del nuevo monasterio, después de su muerte.
Bermudo II falleció en el año 999, y aunque murió en el Bierzo (Villabuena) no pudo ser enterrado en el monasterio por no haber estado terminada la iglesia que debería acogerlo. Sin embargo, algunos autores consideran que la sepultura de Bermudo II permaneció en Carracedo desde 999 hasta 1138 y que posteriormente fue trasladado a San Isidoro de León.
Con la muerte del rey y la desaparición de Almanzor, posiblemente muchos abades y monjes regresaron a sus monasterios anteriores, lo que supuso la decadencia de Carracedo. Ya en el siglo XII, la infanta doña Sancha lo mandó restaurar y lo cedió al abad Florencio y a los monjes del cercano monasterio de Santa María de Valverde, en Corullón.
A partir de entonces, Carracedo adquirió un enorme prestigio en todo el Norte de España, convirtiéndose en un auténtico poderío económico. Ejerció jurisdicción, además de sobre otros monasterios bercianos, en Galicia, Asturias y León.
Hacia 1203, la comunidad abandonó los hábitos benedictinos y tomó los de la Orden del Cister, pasando a llamarse Monasterio de Santa María de Carracedo. En el siglo XIV se inició una época de profunda crisis espiritual y económica en el Cister que provocó el decaimiento total del Monasterio de Carracedo.
Restableciéndose de nuevo en el siglo XVI el resplandor religiosos de Carracedo, el monasterio tuvo una gran influencia en las gentes del pueblo; los niños acudían a su escuela; los enfermos buscaban remedio a sus enfermedades en el hospital que los frailes cuidaban; y los pobres de la comarca eran recibidos para remediar las necesidades físicas del hambre.
En el siglo XIX, los monjes se dispersaron debido a la invasión napoleónica, pero sobre todo por la ley de desamortización de Mendizabal (1835). Fue entonces cuando la comunidad desapareció; se abandonó el cenobio y la mayor parte del edificio pasó a manos privadas, con el consiguiente y progresivo deterioro de las dependencias del monasterio, así como la desaparición de muchas obras de reconocido valor artístico.
En 1928 fue declarado Monumento Nacional, comenzando en la década de los sesenta las primeras restauraciones. En 1988, la Diputación Provincial de León, junto con el Obispado de Astorga, inició la restauración y consolidación del edificio.
Horario de visita:
Invierno: 1 noviembre – 31 marzo, de 10h a 14h y de 16h a 18h.
Verano: 1 abril – 31 octubre, de 10h a 14h y de 17h a 20h.
Bibliografía: El Monasterio de Carracedo: José Antonio Balboa de Paz; Documentos información del Instituto Leonés de Cultura y de la Diputación de León. Wikipedia.